sábado, 26 de abril de 2014

Los templos de Angkor

Finalmente nuestro Tuk Tukero no se presentó a las 8 de la mañana y después de esperarle 15 minutos decidimos arreglar con otro transportista del hotel que nos llevara a ver los templos. Aprendida una lección importante, no te puedes fiar de un tuk tukero de la calle porque después de regatearle el precio y conseguir una buena oferta (30 dolares los dos días de visita, que tampoco es barato), si se encuentra después a otros turistas dispuestos a pagarle mas, te va a dejar tirado. 



Mas vale pagar los 3 dolares extra que nos costó el conductor del hotel (18 dolares/día) y dejarte de problemas. También eso nos permitió hacer un descanso en medio del ajetreado día para volver al hotel a comer y darnos un bañito en la piscina antes de continuar en el calor mas absoluto visitando templos, hasta la puesta del sol, que algunos te cobran aparte entre 5 y 7 dolares por puesta de sol o amanecer, pero que en nuestro caso también estaba incluido en el precio. 



Pero empecemos por el principio. Salimos a eso de las 8:30 hasta las taquillas de Angkor, y después de sortear varios autobuses de turistas chinos (la mayoría), nos hicimos hueco en una ventanilla en la que no había nadie y sacamos las entradas en menos de 5 minutos. No es lo normal, puesto que este es uno de los sitios mas visitados del planeta y el resto de las mas de 25 ventanillas tenían colas de 10 personas, pero con eso ganamos un poco de tiempo y llegamos a Angkor Wat. 



Angkor Wat es el templo principal de este completo que ocupa cerca de 70 kilómetros de selva y ruinas de piedra. Se encuentra rodeado de un lago kilométrico delimitado por paredes construidas de roca, y un pasadizo de piedras te lleva desde fuera al interior del complejo. 








No obstante, la cantidad de gente a esa hora del día, ya que todos los tours empiezan por ahí, y la luz del sol  que sale por detrás del templo, y que hace que las fotos queden a contraluz, nos hicieron variar nuestros planes y comenzar la visita al revés. Empezar visitando los últimos templos a primera hora, cuando todavía no han llegado las masas de turistas y terminar por Angkor Wat con la luz del atardecer bañando la piedra de sus muros (y sobretodo con menos turistas). 



El primero que visitamos se llama Bayon y es famoso porque cada una de las torres que lo coronan tiene en sus laterales esculpidas en la piedra, las caras de distintos reyes, mirando hacia los puntos cardinales y esbozando una media sonrisa. Este templo es magnifico en cuanto a la escultura de la piedra, y después de algo mas de media hora pasamos al siguiente. 


De camino entre templos pudimos ver un  antiguo puente de roca al que le ha crecido un árbol en medio en la parte superior y que actualmente se encuentra en desuso puesto que las aguas han cambiado su curso, reduciendo su caudal y modificando la trayectoria. También varias rocas tiradas por aquí y por allí entre los arboles y frondosos matorrales nos hacían ver que la selva intenta recuperar lo que siempre le ha pertenecido y que tarde o temprano volverá a su poder. 





Varias veces en este recorrido he pensado que algunos de los templos resisten y resistirán solamente algunos años más y que en breve será difícil acceder a determinadas áreas por la peligrosidad de los desprendimientos o incluso que algunos templos haya que moverlos por completo piedra a piedra para evitar el poder de los arboles y sus raíces.  








El siguiente templo en visitar es quizás el mas espectacular. Angkor Thom. No sólo porque se rodó alguna escena de la película Tomb Rider entre sus muros, sino porque el especial enclave de este templo completamente en medio de la selva y plagado de arboles gigantes de raíces poderosas hace de sus rincones algo místico e inigualable. Las rocas van cediendo espacio a los arboles, moviendo soportales con sus poderosas garras y naciendo nuevos brotes de raíces entre las juntas de la piedra. No se puede explicar la magia del sitio mas que viendo las fotos.

 Quizás un poco soliviantada la magia por los alaridos de miles de ruidosos turistas chinos. No podrán hablar mas bajo o callarse algún rato? Quizás los españoles seamos también un poco así, como los chinos de Europa en ese sentido, pero estos muros invitan a la paz, contemplación y silencio. Muy distinto del bullicio de turistas y la lucha por un hueco para hacer la foto en el lugar determinado en los pocos segundos que tienes hasta que el siguiente visitante te esté empujando para que te vayas y hacerse su foto. 


Dentro del turismo tradicional, siempre procuro buscar algo fuera de lo normal, y en este caso se trata de un relieve que hay en este templo y que muestra la figura tallada en la piedra de un dinosaurio. Dado que el hombre no convivió con los dinosaurios (según la arqueología clásica) y que estos templos datan del sigo XI es muy extraño e inexplicable dicha imagen, y nadie ha sabido cómo y porqué se encuentra en estos muros y porqué no hay ninguna mas en el resto de templos. Tenía ganas de venir a fotografiarla y verla en persona, ya que la había visto en Internet con mi amigo y colega investigador Isaac, estudiando los OPARTS u objetos fuera de lugar, pero no es lo mismo ver fotos que tenerlo a escasos centímetros. 

Así, y después de un par de templos mas de cuyo nombre no me acuerdo, pero de sus prolongadas e interminables escaleras sí, llego el momento de hacer un merecido descanso, volver al hotel, darnos un baño, comer algo y hasta casi dormir 15 minutos de siesta que nos vinieron como mano de santo para el ultimo esfuerzo. 






Ahí nos esperaba de nuevo nuestro conductor para llevarnos a ver Angkor Wat, uno de los mas increíbles sitios en los que haya estado. Pudimos ver a muchos monjes budistas visitando esta maravilla, como si de colegios de estudiantes se tratara, con sus profesores y ayudantes, estudiando los magníficos bajorrelieves que muestran las batallas de los reyes Khamer contra los Siameses y rodean el templo a lo largo de facilmente 2 kilómetros de paredes. 
En su momento debieron tener color y hasta dorados, como refleja algún resto en determinados sitios, lo que debió hacer de este sitio algo sumamente brillante con el sol e inigualable en su época. 






Para terminar el día de visitas a los templos, habíamos acordado con el conductor que nos esperara para poder ver la puesta de sol desde lo alto de una montaña cercana. Allí nos dirigimos todos, en procesión, como una manada de borreguitos subiendo la montaña. Un ultimo esfuerzo que se podía hacer a lomos de un elefante por la módica cantidad de 22 dolares, pero que pensamos que aún no estamos lo suficiente mayores y no somos lo suficientemente ricos como para poder permitirnos. 20 minutos de trecking de subida coronados por un nuevo templo al que subir mediante interminables escaleras hasta su cima, era lo que mejor nos venía a todos los que estábamos allí, pero todo fuera por ver atardecer. 

Allí llegamos y subimos los peldaños de un templo mas parecido a una pirámide (que coincidencias en las formas arquitectónicas con las pirámides de México, por cierto) y encontramos un huequecillo al lado de unos monjes para poder ver atardecer. Mientras, ellos se hacían fotos en poses hasta incluso con sexappeal. Muy divertido, pero estábamos muy cerca como para haberlos fotografiado. Y en estas llegó uno de los guardas del templo para decirnos que hoy no había puesta de sol, que se cancelaba. Jajajaja. No me lo podía creer. Puesta de sol, postpuesta hasta mañana. Y es que unos nubarrones impedían ver con claridad el sol y la incipiente calima formaba una bruma que no dejaba lugar a dudas. La puesta de Sol se había Cancelado. 






Y en esas los guardas empezaron a echarnos del templo, 

aquí no hay nada que ver, señores !!! dispérsense !!! No he visto nada tan gracioso en mucho tiempo. 
Y con esas bajamos la montaña, esta vez por el sendero de los elefantes y en su compañía, mucho mas entretenido y vistoso. 






Ya de vuelta de los templos, agotados y aplatanados por el calor sólo acertamos a comprar unos insectos fritos para la cena (mayormente grillos y ranas) y unos rollitos mientras planificabamos el siguiente día de visita que empezaba a las 5 de la mañana. Un breve paseo por los puestos del mercado nocturno donde lo mas interesante eran las actuaciones de un travesti vestido de shakira en un escenario improvisado frente a los sillones de masajes de pies, un negocio que abunda en esta ciudad y ciertamente barato. por 4 dolares media hora en un sitio medianamente limpio y decente. Algunos son simples tapaderas de negocios de sexo, aunque también hay bares en las zonas mas turísticas en los que abiertamente se puede ver que son "bares de citas". 

Respecto al tema compras, también ha sido una decepción este país. La mayoria de las las cosas son de mala calidad, traídas de china y nada esta hecho a mano. tienen lo mismo en todos los puestos, y los precios son ridiculamente excesivos. Además los vendedores no saben tratar al cliente, son rudos, no tienen dotes comerciales y tampoco son agradables en la negociación, muy distintos a otros países limítrofes. muchas veces cuando te vas del puesto los puedes oír algún comentario en su idioma, como si te insultaran por no comprarles. algunos se ofenden incluso y te insultan en ingles o te llaman mala persona. Y es que están acostumbrados a engañar y estafar al turista, y que uno intente sacar un precio razonable les parece hasta mal. Las cosas que venden son falsificaciones de mala calidad. Te intentan vender piedras preciosas cuando se ve que es cristal tallado, aleaciones de plata de bajo contenido como si fueran plata esterlina, maderas talladas a mano cuando son hechas a maquina, hueso tallado por resina de molde a la que se le ve aún el reborde. En fin.... una decepción. Así que nos llevamos algo de dinero de vuelta que nunca esta mal, y pocos souvenirs en la maleta. 

Nota: 
Hoy a las 5 de la mañana salíamos para ver amanecer y seguir con los templos de Angkor. Lamentablemente, un golpe de calor, un torzón, insolación o simplemente una intoxicación por los insectos en mal estado de ayer me han dejado KO para la visita de hoy. Así que el blog del viaje termina inesperadamente aquí con este post inacabado. Mañana salimos de vuelta a Londres. Madre mía que paliza. Igual era mejor haber madrugado el primer día y el ultimo ver la puesta de sol. La próxima vez... o no.

 Ciao Cambodia. 

1 comentario:

  1. Nos has dejado con la intriga del ultimo dia para que tengamos que ir nosotros a verlo en persona. Me gusta.
    Espero que esteis mejor un abrazo y gracias por hacernos participes del viaje

    ResponderEliminar